WLC/LBLA - Eclesiastés

ECLESIASTÉS

CAPÍTULOS 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12
Capítulo 1
Todo es vanidad
LBLA
1 Palabras del Predicador, hijo de David, rey en Jerusalén.
2 Vanidad de vanidades, dice el Predicador, vanidad de vanidades. Todo es vanidad.
3 ¿Qué provecho tiene el hombre de todo su trabajo con que se afana bajo el sol?
4 Generación va, y generación viene, pero la tierra permanece para siempre.
5 También sale el sol, y se pone el sol, y apresurándose vuelve al lugar de donde sale.
6 El viento sopla hacia el sur, y gira hacia el norte; girando y girando va el viento, y sobre sus giros el viento vuelve.
7 Todos los ríos van al mar, pero el mar no se llena; al lugar donde los ríos fluyen, allí vuelven a fluir.
8 Todas las cosas son fatigosas, más de lo que el hombre puede expresar; nunca se sacia el ojo de ver, ni el oído se harta de oír.
9 Lo que fue, eso será, y lo que se hizo, eso se hará; no hay nada nuevo bajo el sol.
10 ¿Hay algo de que se pueda decir: Mira, esto es nuevo? Ya fue en los siglos que nos precedieron.
11 No hay memoria de lo que precedió, ni tampoco de lo que sucederá habrá memoria en los que serán después.
12 Yo, el Predicador, he sido rey sobre Israel en Jerusalén.
13 Y puse mi corazón en inquirir y explorar con sabiduría todo lo que se hace bajo el cielo. Es una tarea difícil que Dios ha dado a los hijos de los hombres para que se ocupen en ella.
14 He visto todas las obras que se hacen bajo el sol, y he aquí, todo es vanidad y correr tras el viento.
15 Lo torcido no se puede enderezar, y lo que falta no se puede contar.
16 Hablé en mi corazón, diciendo: He aquí, yo he engrandecido y aumentado la sabiduría más que todos los que fueron antes de mí sobre Jerusalén, y mi corazón ha percibido mucha sabiduría y conocimiento.
17 Y puse mi corazón en conocer la sabiduría y en conocer la locura y la necedad; comprendí que esto también es correr tras el viento.
18 Porque en mucha sabiduría hay mucha angustia, y quien aumenta conocimiento, aumenta dolor.
WLC
1 דִּבְרֵי קֹהֶלֶת בֶּן־דָּוִד מֶלֶךְ בִּירוּשָׁלִָם׃
2 הֲבֵל הֲבָלִים אָמַר קֹהֶלֶת הֲבֵל הֲבָלִים הַכֹּל הָבֶל׃
3 מַה־יִּתְרֹון לָאָדָם בְּכָל־עֲמָלֹו שֶׁיַּעֲמֹל תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ׃
4 דּוֹר הֹלֵךְ וְדוֹר בָּא וְהָאָרֶץ לְעֹולָם עֹמָדֶת׃
5 וְזָרַח הַשֶּׁמֶשׁ וּבָא הַשָּׁמֶשׁ וְאֶל־מְקֹומֹו שׁוֹאֵף זוֹרֵחַ הוּא שָׁם׃
6 הֹולֵךְ אֶל־דָּרֹום וְסֹובֵב אֶל־צָפֹון סֹובֵב סֹבֵב הֹולֵךְ הָרוּחַ וְעַל־סְבִיבֹתָיו שָׁב הָרוּחַ׃
7 כָּל־הַנְּחָלִים הֹלְכִים אֶל־הַיָּם וְהַיָּם אֵינֶנּוּ מָלֵא אֶל־מְקֹום שֶׁהַנְּחָלִים הֹלְכִים שָׁם הֵם שָׁבִים לָלָכֶת׃
8 כָּל־הַדְּבָרִים יְגֵעִים לֹא־יוּכַל אִישׁ לְדַבֵּר לֹא־תִשְׂבַּע עַיִן לִרְאֹות וְלֹא־תִמָּלֵא אֹזֶן מִשְּׁמֹעַ׃
9 מַה־שֶּׁהָיָה הוּא שֶׁיִּהְיֶה וּמַה־שֶּׁנַּעֲשָׂה הוּא שֶׁיֵּעָשֶׂה וְאֵין כָּל־חָדָשׁ תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ׃
10 יֵשׁ דָּבָר שֶׁיֹּאמַר רְאֵה־זֶה חָדָשׁ הוּא כְּבָר הָיָה לְעֹלָמִים אֲשֶׁר הָיָה מִלְּפָנֵנוּ׃
11 אֵין זִכְרֹון לָרִאשֹׁנִים וְגַם לָאַחֲרֹנִים שֶׁיִּהְיוּ לֹא־יִהְיֶה לָהֶם זִכָּרֹון עִם שֶׁיִּהְיוּ לָאַחֲרֹנָה׃
12 אֲנִי קֹהֶלֶת הָיִיתִי מֶלֶךְ עַל־יִשְׂרָאֵל בִּירוּשָׁלִָם׃
13 וְנָתַתִּי אֶת־לִבִּי לִדְרֹושׁ וְלָתוּר בַּחָכְמָה עַל כָּל־אֲשֶׁר נַעֲשָׂה תַּחַת הַשָּׁמָיִם הוּא עִנְיַן רָע נָתַן אֱלֹהִים לִבְנֵי הָאָדָם לַעֲנֹות בֹּו׃
14 רָאִיתִי אֶת־כָּל־הַמַּעֲשִׂים שֶׁנַּעֲשׂוּ תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ וְהִנֵּה הַכֹּל הֶבֶל וּרְעוּת רוּחַ׃
15 מְעֻוָּת לֹא־יוּכַל לִתְקֹן וְחֶסְרֹון לֹא־יוּכַל לְהִמָּנוֹת׃
16 דִּבַּרְתִּי אֲנִי עִם־לִבִּי לֵאמֹר אֲנִי הִנֵּה הִגְדַּלְתִּי וְהֹוסַפְתִּי חָכְמָה עַל כָּל־אֲשֶׁר־הָיָה לְפָנַי עַל־יִרְשָׁלִָם וְלִבִּי רָאָה הַרְבֵּה חָכְמָה וָדָעַת׃
17 וָאֶתְּנָה לִבִּי לָדַעַת חָכְמָה וְדַעַת הֹולֵלֹות וְשִׂכְלוּת יָדַעְתִּי שֶׁגַּם־זֶה הוּא רַעְיֹון רוּחַ׃
18 כִּי בְּרֹב חָכְמָה רָב־כָּעַס וְיֹוסִיף דַּעַת יֹוסִיף מַכְאֹוב׃
Capítulo 2
Las pruebas del Predicador
LBLA
1 Dije yo en mi corazón: Ven ahora, te probaré con alegría y gozarás de lo bueno. Mas he aquí, esto también era vanidad.
2 A la risa dije: Es locura, y al placer: ¿De qué sirve esto?
3 Exploré con mi corazón cómo estimular mi cuerpo con el vino, mientras mi corazón me guiaba con sabiduría, y cómo asir la necedad, hasta ver qué era bueno que los hijos de los hombres hicieran bajo el cielo durante los contados días de su vida.
4 Engrandecí mis obras, edifiqué para mí casas, planté para mí viñas.
5 Me hice huertos y jardines, y planté en ellos toda clase de árboles frutales.
6 Me hice estanques de aguas para regar de ellos un bosque donde crecieran los árboles.
7 Compré esclavos y esclavas, y tuve esclavos nacidos en casa. También tuve gran cantidad de ganados, vacas y ovejas, más que todos los que fueron antes de mí en Jerusalén.
8 También amontoné para mí plata y oro, y tesoros de reyes y de provincias. Me procuré cantores y cantoras, y los deleites de los hijos de los hombres, una mujer y muchas concubinas.
9 Y me engrandecí y aumenté más que todos los que fueron antes de mí en Jerusalén; también mi sabiduría permaneció conmigo.
10 No negué a mis ojos nada de lo que desearon, ni aparté mi corazón de ningún placer, porque mi corazón se alegraba de todo mi trabajo, y esta fue la recompensa de todo mi esfuerzo.
11 Cuando consideré todo lo que mis manos habían hecho y el trabajo en que me había empeñado, he aquí, todo era vanidad y correr tras el viento, y no había provecho bajo el sol.
12 Entonces volví a considerar la sabiduría, la locura y la necedad, porque ¿qué hará el hombre que venga después del rey? Nada excepto lo que ya se ha hecho.
13 Y vi que la sabiduría tiene ventaja sobre la necedad, como ventaja tiene la luz sobre las tinieblas.
14 El sabio tiene sus ojos en su cabeza, pero el necio anda en tinieblas. También comprendí que un mismo suceso les acontece a todos.
15 Entonces dije en mi corazón: Como sucede al necio, también me sucederá a mí. ¿Para qué, pues, he sido más sabio? Y dije en mi corazón: Esto también es vanidad.
16 Porque no habrá memoria duradera del sabio ni del necio; en los días venideros todo será olvidado. ¡Y cómo muere el sabio junto con el necio!
17 Por eso aborrecí la vida, porque la obra que se hace bajo el sol era penosa para mí, pues todo es vanidad y correr tras el viento.
18 También aborrecí todo el fruto de mi trabajo con que me había afanado bajo el sol, pues lo dejaré al hombre que vendrá después de mí.
19 ¿Y quién sabe si será sabio o necio? Sin embargo, él se enseñoreará de todo el fruto de mi trabajo con que me afané y actué sabiamente bajo el sol. Esto también es vanidad.
20 Por tanto, me desesperé en mi corazón acerca de todo el trabajo en que me había afanado bajo el sol.
21 Porque hay hombre cuyo trabajo es con sabiduría, conocimiento y habilidad, pero a quien no ha trabajado le dejará su porción. Esto también es vanidad y gran mal.
22 Pues, ¿qué obtiene el hombre de todo su trabajo y del anhelo de su corazón con que se afana bajo el sol?
23 Porque todos sus días son penas, y su trabajo es aflicción; aun de noche su corazón no descansa. Esto también es vanidad.
24 No hay nada mejor para el hombre que comer y beber y decirse que su trabajo es bueno. Esto también he visto que viene de la mano de Dios.
25 Porque ¿quién puede comer o quién puede gozar, aparte de mí?
26 Porque al hombre que le agrada, Dios le da sabiduría, conocimiento y alegría; pero al pecador le da la tarea de juntar y amontonar para dárselo al que agrada a Dios. Esto también es vanidad y correr tras el viento.
WLC
1 אָמַרְתִּי אֲנִי בְּלִבִּי לְכָה־נָּא אֲנַסְּכָה בְשִׂמְחָה וּרְאֵה בְטֹוב וְהִנֵּה גַם־הוּא הָבֶל׃
2 לִשְׂחֹוק אָמַרְתִּי מְהֹולָל וּלְשִׂמְחָה מַה־זֹּה עֹשָׂה׃
3 תַּרְתִּי בְלִבִּי לִמְשֹׁוךְ בַּיַּיִן אֶת־בְּשָׂרִי וְלִבִּי נֹהֵג בַּחָכְמָה וְלֶאֱחֹז בְּסִכְלוּת עַד אֲשֶׁר־אֶרְאֶה אֵי־זֶה טֹוב לִבְנֵי הָאָדָם אֲשֶׁר יַעֲשׂוּ תַּחַת הַשָּׁמַיִם מִסְפַּר יְמֵי חַיֵּיהֶם׃
4 הִגְדַּלְתִּי מַעֲשָׂי בָּנִיתִי לִי בָתִּים נָטַעְתִּי לִי כְרָמִים׃
5 עָשִׂיתִי לִי גַּנֹּות וּפַרְדֵּסִים וְנָטַעְתִּי בָהֶם עֵץ כָּל־פֶּרִי׃
6 עָשִׂיתִי לִי בְּרֵכֹות מָיִם לְהַשְׁקֹות מֵהֶם יַעַר צוֹמֵחַ עֵצִים׃
7 קָנִיתִי עֲבָדִים וּשְׁפָחֹות וּבְנֵי־בַיִת הָיָה לִי גַּם מִקְנֶה בָקָר וָצֹאן הַרְבֵּה הָיָה לִי מִכֹּל שֶׁהָיוּ לְפָנַי בִּירוּשָׁלִָם׃
8 כָּנַסְתִּי לִי גַּם־כֶּסֶף וְזָהָב וּסְגֻלַּת מְלָכִים וְהַמְּדִינֹות עָשִׂיתִי לִי שָׁרִים וְשָׁרֹות וְתַעֲנֻגוֹת בְּנֵי הָאָדָם שִׁדָּה וְשִׁדֹּות׃
9 וְגָדַלְתִּי וְהֹוסַפְתִּי מִכֹּל שֶׁהָיָה לְפָנַי בִּירוּשָׁלִָם אַף־חָכְמָתִי עָמְדָה לִּי׃
10 וְכֹל אֲשֶׁר שָׁאֲלוּ עֵינַי לֹא אָצַלְתִּי מֵהֶם לֹא־מָנַעְתִּי אֶת־לִבִּי מִכָּל־שִׂמְחָה כִּי־לִבִּי שָׂמֵחַ מִכָּל־עֲמָלִי וְזֶה־הָיָה חֶלְקִי מִכָּל־עֲמָלִי׃
11 וּפָנִיתִי אֲנִי בְּכָל־מַעֲשַׂי שֶׁעָשׂוּ יָדַי וּבֶעָמָל שֶׁעָמַלְתִּי לַעֲשֹׂות וְהִנֵּה הַכֹּל הֶבֶל וּרְעוּת רוּחַ וְאֵין יִתְרֹון תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ׃
12 וּפָנִיתִי אֲנִי לִרְאֹות חָכְמָה וְהֹולֵלֹות וְסִכְלוּת כִּי מֶה הָאָדָם שֶׁיָּבֹוא אַחַר הַמֶּלֶךְ אֵת אֲשֶׁר־כְּבָר עָשֻׂהוּ׃
13 וְרָאִיתִי אָנִי שֶׁיֵּשׁ יִתְרֹון לַחָכְמָה מִן־הַסִּכְלוּת כִּיתְרֹון הָאֹור מִן־הַחֹשֶׁךְ׃
14 הֶחָכָם עֵינָיו בְּרֹאשׁוֹ וְהַכְּסִיל בַּחֹשֶׁךְ הֹולֵךְ וְיָדַעְתִּי גַם־אָנִי שֶׁמִּקְרֶה אֶחָד יִקְרֶה אֶת־כֻּלָּם׃
15 וְאָמַרְתִּי אֲנִי בְּלִבִּי כְּמִקְרֵה הַכְּסִיל גַּם־אֲנִי יִקְרֵנִי וְלָמָּה חָכַמְתִּי אֲנִי אָז יֹותֵר וְדִבַּרְתִּי בְלִבִּי שֶׁגַּם־זֶה הָבֶל׃
16 כִּי אֵין זִכְרֹון לֶחָכָם עִם־הַכְּסִיל לְעֹולָם בְּשֶׁכְּבָר הַיָּמִים הַבָּאִים הַכֹּל נִשְׁכָּח וְאֵיךְ יָמוּת הֶחָכָם עִם־הַכְּסִיל׃
17 וְשָׂנֵאתִי אֶת־הַחַיִּים כִּי רַע עָלַי הַמַּעֲשֶׂה שֶׁנַּעֲשָׂה תַּחַת הַשֶּׁמֶשׁ כִּי־הַכֹּל הֶבֶל וּרְעוּת רוּחַ׃
18 וְשָׂנֵאתִי אֲנִי אֶת־כָּל־עֲמָלִי שֶׁאֲנִי עָמֵל תַּחַת הַשֶּׁמֶשׁ שֶׁאַנִּיחֶנּוּ לָאָדָם שֶׁיִּהְיֶה אַחֲרָי׃
19 וּמִי יֹודֵעַ הֶחָכָם יִהְיֶה אוֹ סָכָל וְיִשְׁלַט בְּכָל־עֲמָלִי שֶׁעָמַלְתִּי וְשֶׁחָכַמְתִּי תַּחַת הַשֶּׁמֶשׁ גַּם־זֶה הָבֶל׃
20 וְסַבֹּותִי אֲנִי לְיַאֵשׁ אֶת־לִבִּי עַל כָּל־הֶעָמָל שֶׁעָמַלְתִּי תַּחַת הַשֶּׁמֶשׁ׃
21 כִּי־יֵשׁ אָדָם שֶׁעֲמָלֹו בְּחָכְמָה וּבְדַעַת וּבְכִשְׁרֹון וּלְאָדָם שֶׁלֹּא עָמַל־בֹּו יִתְּנֶנּוּ חֶלְקֹו גַּם־זֶה הֶבֶל וְרָעָה רַבָּה׃
22 כִּי מֶה־הֹוֶה לָאָדָם בְּכָל־עֲמָלֹו וּבְרַעְיֹון לִבֹּו שֶׁהוּא עָמֵל תַּחַת הַשֶּׁמֶשׁ׃
23 כִּי כָל־יָמָיו מַכְאֹבִים וָכַעַס עִנְיָנֹו גַּם־בַּלַּיְלָה לֹא־שָׁכַב לִבֹּו גַּם־זֶה הֶבֶל הוּא׃
24 אֵין־טֹוב בָּאָדָם שֶׁיֹּאכַל וְשָׁתָה וְהֶרְאָה אֶת־נַפְשֹׁו טֹוב בַּעֲמָלֹו גַּם־זֹה רָאִיתִי אָנִי כִּי מִיַּד הָאֱלֹהִים הִיא׃
25 כִּי מִי יֹאכַל וּמִי יָחוּשׁ חוּץ מִמֶּנִּי׃
26 כִּי לְאָדָם שֶׁטֹּוב לְפָנָיו נָתַן חָכְמָה וְדַעַת וְשִׂמְחָה וְלַחֹטֶא נָתַן עִנְיָן לֶאֱסֹף וְלִכְנֹוס לָתֵת לְטֹוב לִפְנֵי הָאֱלֹהִים גַּם־זֶה הֶבֶל וּרְעוּת רוּחַ׃
Capítulo 3
Todo tiene su tiempo
LBLA
1 Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado;
3 tiempo de matar, y tiempo de curar; tiempo de destruir, y tiempo de edificar;
4 tiempo de llorar, y tiempo de reír; tiempo de endechar, y tiempo de bailar;
5 tiempo de esparcir piedras, y tiempo de juntar piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar;
6 tiempo de buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar;
7 tiempo de romper, y tiempo de coser; tiempo de callar, y tiempo de hablar;
8 tiempo de amar, y tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, y tiempo de paz.
9 ¿Qué provecho tiene el que trabaja en aquello en que se afana?
10 Yo he visto la tarea que Dios ha dado a los hijos de los hombres para que se ocupen en ella.
11 Todo lo hizo hermoso en su tiempo; y ha puesto eternidad en el corazón de ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde el principio hasta el fin.
12 Yo sé que no hay para ellos cosa mejor que alegrarse y hacer el bien en su vida;
13 y también que es don de Dios que todo hombre coma y beba, y goce el bien de toda su labor.
14 Sé que todo lo que Dios hace será perpetuo; sobre ello no hay que añadir, ni de ello hay que disminuir; y lo hace Dios, para que delante de él teman los hombres.
15 Aquello que fue, ya es; y lo que ha de ser, fue ya; y Dios restaura lo que pasó.
16 Vi más debajo del sol: en lugar del juicio, allí impiedad; y en lugar de la justicia, allí iniquidad.
17 Dije en mi corazón: Al justo y al impío juzgará Dios; porque allí hay un tiempo para todo lo que se quiere y para todo lo que se hace.
18 Dije en mi corazón: Es por causa de los hijos de los hombres, para que Dios los pruebe, y para que vean que ellos mismos son semejantes a las bestias.
19 Porque lo que sucede a los hijos de los hombres, y lo que sucede a las bestias, un mismo suceso es: como mueren los unos, así mueren los otros, y una misma respiración tienen todos; ni tiene más el hombre que la bestia; porque todo es vanidad.
20 Todo va a un mismo lugar; todo es hecho del polvo, y todo volverá al mismo polvo.
21 ¿Quién sabe que el espíritu de los hijos de los hombres sube arriba, y que el espíritu del animal desciende abajo a la tierra?
22 Así que he visto que no hay cosa mejor para el hombre que alegrarse en su trabajo, porque esa es su parte; porque ¿quién lo llevará para que vea lo que ha de ser después de él?
WLC
1 לַכֹּל זְמָן וְעֵת לְכָל־חֵפֶץ תַּחַת הַשָּׁמָיִם׃
2 עֵת לָלֶדֶת וְעֵת לָמוּת עֵת לָטַעַת וְעֵת לַעֲקֹור נָטוּעַ׃
3 עֵת לַהֲרֹוג וְעֵת לִרְפֹּוא עֵת לִפְרֹוץ וְעֵת לִבְנֹות׃
4 עֵת לִבְכֹּות וְעֵת לִשְׂחֹוק עֵת סְפֹוד וְעֵת רְקֹוד׃
5 עֵת לְהַשְׁלִיךְ אֲבָנִים וְעֵת כְּנֹס אֲבָנִים עֵת לַחֲבֹוק וְעֵת לִרְחֹק מֵחַבֵּק׃
6 עֵת לְבַקֵּשׁ וְעֵת לְאַבֵּד עֵת לִשְׁמֹור וְעֵת לְהַשְׁלִיךְ׃
7 עֵת לִקְרֹועַ וְעֵת לִתְפֹּור עֵת לַחֲשֹׁות וְעֵת לְדַבֵּר׃
8 עֵת לֶאֱהֹב וְעֵת לִשְׂנֹא עֵת מִלְחָמָה וְעֵת שָׁלֹום׃
9 מַה־יִּתְרֹון הָעֹושֶׂה בַּאֲשֶׁר הוּא עָמֵל׃
10 רָאִיתִי אֶת־הָעִנְיָן אֲשֶׁר נָתַן אֱלֹהִים לִבְנֵי הָאָדָם לַעֲנֹות בֹּו׃
11 אֶת־הַכֹּל עָשָׂה יָפֶה בְעִתֹּו גַּם אֶת־הָעֹלָם נָתַן בְּלִבָּם מִבְּלִי אֲשֶׁר לֹא־יִמְצָא הָאָדָם אֶת־הַמַּעֲשֶׂה אֲשֶׁר־עָשָׂה הָאֱלֹהִים מֵרֹאשׁ וְעַד־סֹוף׃
12 יָדַעְתִּי כִּי אֵין טֹוב בָּם כִּי אִם־לִשְׂמֹוחַ וְלַעֲשֹׂות טֹוב בְּחַיָּיו׃
13 וְגַם כָּל־הָאָדָם שֶׁיֹּאכַל וְשָׁתָה וְרָאָה טֹוב בְּכָל־עֲמָלֹו מַתַּת אֱלֹהִים הִיא׃
14 יָדַעְתִּי כִּי כָּל־אֲשֶׁר יַעֲשֶׂה הָאֱלֹהִים הוּא יִהְיֶה לְעֹולָם עָלָיו אֵין לְהֹוסִיף וּמִמֶּנּוּ אֵין לִגְרֹעַ וְהָאֱלֹהִים עָשָׂה שֶׁיִּרְאוּ מִלְּפָנָיו׃
15 מַה־שֶּׁהָיָה כְּבָר הוּא וַאֲשֶׁר לִהְיֹות כְּבָר הָיָה וְהָאֱלֹהִים יְבַקֵּשׁ אֶת־נִרְדָּף׃
16 וְעֹוד רָאִיתִי תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ מְקֹום הַמִּשְׁפָּט שָׁמָּה הָרֶשַׁע וּמְקֹום הַצֶּדֶק שָׁמָּה הָרָשַׁע׃
17 אָמַרְתִּי אֲנִי בְּלִבִּי אֶת־הַצַּדִּיק וְאֶת־הָרָשָׁע יִשְׁפֹּט הָאֱלֹהִים כִּי־עֵת לְכָל־חֵפֶץ וְעַל כָּל־הַמַּעֲשֶׂה שָׁם׃
18 אָמַרְתִּי אֲנִי בְּלִבִּי עַל־דִּבְרַת בְּנֵי הָאָדָם לְבָרָם הָאֱלֹהִים וְלִרְאֹות שְׁהֶם־בְּהֵמָה הֵמָּה לָהֶם׃
19 כִּי מִקְרֶה בְנֵי־הָאָדָם וּמִקְרֶה הַבְּהֵמָה וּמִקְרֶה אֶחָד לָהֶם כְּמֹות זֶה כֵּן מֹות זֶה וְרוּחַ אֶחָד לַכֹּל וּמֹותַר הָאָדָם מִן־הַבְּהֵמָה אָיִן כִּי הַכֹּל הָבֶל׃
20 הַכֹּל הֹולֵךְ אֶל־מָקֹום אֶחָד הַכֹּל הָיָה מִן־הֶעָפָר וְהַכֹּל שָׁב אֶל־הֶעָפָר׃
21 מִי יֹודֵעַ רוּחַ בְּנֵי הָאָדָם הָעֹלָה הִיא לְמָעְלָה וְרוּחַ הַבְּהֵמָה הַיֹּרֶדֶת הִיא לְמַטָּה לָאָרֶץ׃
22 וְרָאִיתִי כִּי אֵין טֹוב מֵאֲשֶׁר יִשְׂמַח הָאָדָם בְּמַעֲשָׂיו כִּי־הוּא חֶלְקֹו כִּי מִי יְבִיאֶנּוּ לִרְאֹות בְּמֶה שֶׁיִּהְיֶה אַחֲרָיו׃
Capítulo 4
Opresiones y vanidades
LBLA
1 Me volví y vi todas las opresiones que se hacen debajo del sol; y he aquí, las lágrimas de los oprimidos, y no tienen quien los consuele; y la fuerza está en la mano de sus opresores, y no hay quien los consuele.
2 Y alabé yo a los finados, los que ya murieron, más que a los vivientes, los que viven todavía.
3 Y mejor que ambos es aquel que no ha sido todavía, que no ha visto las malas obras que se hacen debajo del sol.
4 He visto asimismo que todo trabajo y toda excelencia de obras despierta la envidia del hombre contra su prójimo. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.
5 El necio cruza sus manos y come su propia carne.
6 Mejor es un puño lleno con descanso, que ambos puños llenos con trabajo y aflicción de espíritu.
7 Me volví y vi vanidad debajo del sol.
8 Hay un solo hombre sin sucesor, que no tiene hijo ni hermano; pero no hay fin a todo su trabajo, ni sus ojos se sacian de riquezas, ni se pregunta: ¿Para quién trabajo yo y privo mi alma del bien? También esto es vanidad y dura tarea.
9 Mejores son dos que uno, porque tienen mejor paga por su trabajo.
10 Porque si caen, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo que cuando cae, no tiene segundo que lo levante!
11 También si dos se acuestan juntos, se calientan; pero uno solo, ¿cómo se calentará?
12 Y si alguno prevalece contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto.
13 Mejor es el muchacho pobre y sabio que el rey viejo y necio que no admite consejos;
14 porque de la cárcel salió para reinar, aunque en su reino nació pobre.
15 Vi a todos los vivientes que andan debajo del sol con el muchacho segundo que estará en lugar del rey.
16 No tuvo fin todo el pueblo que estaba delante de ellos; sin embargo, los que vendrán después no se alegrarán en él. Ciertamente también esto es vanidad y aflicción de espíritu.
WLC
1 וְשַׁבְתִּי אֲנִי וָאֶרְאֶה אֶת־כָּל־הָעֲשֻׁקִים אֲשֶׁר נַעֲשִׂים תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ וְהִנֵּה דִּמְעַת הָעֲשֻׁקִים וְאֵין לָהֶם מְנַחֵם וּמִיַּד עֹשְׁקֵיהֶם כֹּחַ וְאֵין לָהֶם מְנַחֵם׃
2 וְשַׁבֵּחַ אֲנִי אֶת־הַמֵּתִים שֶׁכְּבָר מֵתוּ מִן־הַחַיִּים אֲשֶׁר הֵמָּה חַיִּים עֲדֶנָה׃
3 וְטֹוב מִשְּׁנֵיהֶם אֵת אֲשֶׁר עֲדֶן לֹא הָיָה אֲשֶׁר לֹא־רָאָה אֶת־הַמַּעֲשֶׂה הָרָע אֲשֶׁר נַעֲשָׂה תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ׃
4 וְרָאִיתִי אֲנִי אֶת־כָּל־עָמָל וְאֵת כָּל־כִּשְׁרֹון הַמַּעֲשֶׂה כִּי הִיא קִנְאַת אִישׁ מֵרֵעֵהוּ גַּם־זֶה הֶבֶל וּרְעוּת רוּחַ׃
5 הַכְּסִיל חֹבֵק אֶת־יָדָיו וְאֹכֵל אֶת־בְּשָׂרֹו׃
6 טֹוב מְלֹא כַף נָחַת מִמְּלֹא חָפְנַיִם עָמָל וּרְעוּת רוּחַ׃
7 וְשַׁבְתִּי אֲנִי וָאֶרְאֶה הֶבֶל תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ׃
8 יֵשׁ אֶחָד וְאֵין שֵׁנִי גַּם בֵּן וָאָח אֵין־לוֹ וְאֵין קֵץ לְכָל־עֲמָלֹו גַּם־עֵינָיו לֹא־תִשְׂבַּע עֹשֶׁר וּלְמִי אֲנִי עָמֵל וּמְחַסֵּר אֶת־נַפְשִׁי מִטֹּובָה גַּם־זֶה הֶבֶל וְעִנְיַן רָע הוּא׃
9 טֹובִים הַשְּׁנַיִם מִן־הָאֶחָד אֲשֶׁר יֵשׁ־לָהֶם שָׂכָר טֹוב בַּעֲמָלָם׃
10 כִּי אִם־יִפֹּלוּ הָאֶחָד יָקִים אֶת־חֲבֵרֹו וְאִילֹו הָאֶחָד שֶׁיִּפֹּול וְאֵין שֵׁנִי לַהֲקִימֹו׃
11 גַּם אִם־יִשְׁכְּבוּ שְׁנַיִם וְחַם לָהֶם וּלְאֶחָד אֵיךְ יֵחָם׃
12 וְאִם־יִתְקְפֹו הָאֶחָד הַשְּׁנַיִם יַעַמְדוּ נֶגְדֹּו וְהַחוּט הַמְשֻׁלָּשׁ לֹא בִמְהֵרָה יִנָּתֵק׃
13 טֹוב יֶלֶד מִסְכֵּן וְחָכָם מִמֶּלֶךְ זָקֵן וּכְסִיל אֲשֶׁר לֹא־יָדַע לְהִזָּהֵר עֹוד׃
14 כִּי־מִבֵּית הָסוּרִים יָצָא לִמְלֹךְ כִּי גַּם בְּמַלְכוּתֹו נֹולַד רָשׁ׃
15 רָאִיתִי אֶת־כָּל־הַחַיִּים הַמְהַלְּכִים תַּחַת הַשֶּׁמֶשׁ עִם הַיֶּלֶד הַשֵּׁנִי אֲשֶׁר יַעֲמֹד תַּחְתָּיו׃
16 אֵין־קֵץ לְכָל־הָעָם לְכֹל אֲשֶׁר־הָיָה לִפְנֵיהֶם גַּם הָאַחֲרֹונִים לֹא יִשְׂמְחוּ בֹו כִּי־גַם־זֶה הֶבֶל וְרַעְיֹון רוּחַ׃
Capítulo 5
Temer a Dios
LBLA
1 Guarda tus pasos cuando vas a la casa de Dios; acercarse para escuchar es mejor que ofrecer el sacrificio de los necios, porque no saben que hacen mal.
2 No te des prisa con tu boca, ni tu corazón se apresure a proferir palabra delante de Dios; porque Dios está en el cielo y tú estás sobre la tierra; por tanto, sean pocas tus palabras.
3 Porque de la mucha actividad laboral vienen los sueños, y de la mucha palabrería, la voz del necio.
4 Cuando a Dios hagas promesa, no tardes en cumplirla, porque él no se complace en los necios. Cumple lo que prometes.
5 Mejor es que no prometas, y no que prometas y no cumplas.
6 No permitas que tu boca te haga pecar, ni digas delante del mensajero de Dios que fue un error. ¿Por qué ha de airarse Dios a causa de tu voz y destruir la obra de tus manos?
7 Porque en los muchos sueños hay vanidades y muchas palabras; mas tú, teme a Dios.
8 Si opresión de pobres y privación de derecho y de justicia ves en la provincia, no te maravilles de ello; porque sobre otro alto vigila uno más alto, y sobre ellos otros más altos todavía.
9 El provecho de la tierra es para todos; hasta el rey está sujeto a los campos.
10 El que ama el dinero no se saciará de dinero; y el que ama las riquezas no sacará fruto de ellas. También esto es vanidad.
11 Cuando aumentan los bienes, también aumentan los que los consumen. ¿Qué provecho, pues, saca su dueño, sino verlos con sus ojos?
12 Dulce es el sueño del trabajador, haya comido poco o mucho; pero al rico no le deja dormir la abundancia.
13 Hay un grave mal que he visto debajo del sol: las riquezas guardadas para mal de sus dueños.
14 Estas riquezas se pierden por un mal negocio; y si el hombre ha engendrado un hijo, nada queda en su mano.
15 Como salió del vientre de su madre, desnudo, así volverá, y nada tomará del fruto de su trabajo que pueda llevar en su mano.
16 Esto también es un grave mal: que tal como vino, así volverá. ¿Y qué provecho le trae esforzarse para el viento?
17 Además, todos sus días come en tinieblas con mucha frustración, con enfermedad y enojo.
18 He aquí, lo que yo he visto que es bueno y conveniente: comer, beber y gozar del fruto de todo el trabajo con que uno se afana bajo el sol durante los contados días de su vida que Dios le ha dado; porque esta es su parte.
19 Asimismo, a todo hombre a quien Dios ha dado riquezas y bienes, y le ha dado facultad para comer de ello, y tomar su parte y gozar de su trabajo, esto es don de Dios.
20 Porque no se acordará mucho de los días de su vida, pues Dios lo mantendrá ocupado con la alegría de su corazón.
WLC
1 אַל־תְּבַהֵל עַל־פִּיךָ וְלִבְּךָ אַל־יְמַהֵר לְהוֹצִיא דָבָר לִפְנֵי הָאֱלֹהִים כִּי הָאֱלֹהִים בַּשָּׁמַיִם וְאַתָּה עַל־הָאָרֶץ עַל־כֵּן יִהְיוּ דְבָרֶיךָ מְעַטִּים׃
2 כִּי בָּא הַחֲלוֹם בְּרֹב עִנְיָן וְקוֹל כְּסִיל בְּרֹב דְּבָרִים׃
3 כַּאֲשֶׁר תִּדֹּר נֶדֶר לֵאלֹהִים אַל־תְּאַחֵר לְשַׁלְּמֹו כִּי אֵין חֵפֶץ בַּכְּסִילִים אֵת אֲשֶׁר־תִּדֹּר שַׁלֵּם׃
4 טֹוב אֲשֶׁר לֹא־תִדֹּר מִשֶּׁתִּדֹּר וְלֹא תְשַׁלֵּם׃
5 אַל־תִּתֵּן אֶת־פִּיךָ לַחֲטִיא אֶת־בְּשָׂרֶךָ וְאַל־תֹּאמַר לִפְנֵי הַמַּלְאָךְ כִּי שְׁגָגָה הִיא לָמָּה יִקְצֹף הָאֱלֹהִים עַל־קוֹלֶךָ וְחִבֵּל אֶת־מַעֲשֵׂה יָדֶיךָ׃
6 כִּי בְרֹב חֲלֹמוֹת וַהֲבָלִים וּדְבָרִים הַרְבֵּה כִּי אֶת־הָאֱלֹהִים יְרָא׃
7 אִם־עֹשֶׁק רָשׁ וְגֵזֶל מִשְׁפָּט וָצֶדֶק תִּרְאֶה בַמְּדִינָה אַל־תִּתְמַהּ עַל־הַחֵפֶץ כִּי גָבֹהַּ מֵעַל גָּבֹהַּ שֹׁמֵר וּגְבֹהִים עֲלֵיהֶם׃
8 וְיִתְרֹון אֶרֶץ בַּכֹּל היא [הוּא] מֶלֶךְ לְשָׂדֶה נֶעֱבָד׃
9 אֹהֵב כֶּסֶף לֹא־יִשְׂבַּע כֶּסֶף וּמִי־אֹהֵב בֶּהָמֹון לֹא תְבוּאָה גַּם־זֶה הָבֶל׃
10 בִּרְבוֹת הַטּוֹבָה רַבּוּ אֹכְלֶיהָ וּמַה־כִּשְׁרֹון לִבְעָלֶיהָ כִּי אִם־ראית [רְאוּת] עֵינָיו׃
11 מְתוּקָה שְׁנַת הָעֹבֵד אִם־מְעַט וְאִם־הַרְבֵּה יֹאכֵל וְהַשָּׂבָע לֶעָשִׁיר אֵינֶנּוּ מַנִּיחַ לֹו לִישׁוֹן׃
12 יֵשׁ רָעָה חוֹלָה רָאִיתִי תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ עֹשֶׁר שָׁמוּר לִבְעָלָיו לְרָעָתוֹ׃
13 וְאָבַד הָעֹשֶׁר הַהוּא בְּעִנְיַן רָע וְהוֹלִיד בֵּן וְאֵין בְּיָדוֹ מְאוּמָה׃
14 כַּאֲשֶׁר יָצָא מִבֶּטֶן אִמּוֹ עָרֹם יָשׁוּב לָלֶכֶת כְּשֶׁבָּא וּמְאוּמָה לֹא־יִשָּׂא בַעֲמָלֹו שֶׁיֹּלֵךְ בְּיָדֹו׃
15 וְגַם־זֹה רָעָה חוֹלָה כָּל־עֻמַּת שֶׁבָּא כֵּן יֵלֵךְ וּמַה־יִּתְרֹון לֹו שֶׁיַּעֲמֹל לָרוּחַ׃
16 גַּם כָּל־יָמָיו בַּחֹשֶׁךְ יֹאכֵל וְכָעַס הַרְבֵּה וְחָלְיוֹ וָקָצֶף׃
17 הִנֵּה אֲשֶׁר־רָאִיתִי אָנִי טוֹב אֲשֶׁר־יָפֶה לֶאֱכֹל־וְלִשְׁתּוֹת וְלִרְאוֹת טוֹבָה בְּכָל־עֲמָלוֹ שֶׁיַּעֲמֹל תַּחַת־הַשֶּׁמֶשׁ מִסְפַּר יְמֵי־חַיָּיו אֲשֶׁר־נָתַן־לֹו הָאֱלֹהִים כִּי־הוּא חֶלְקוֹ׃
18 גַּם כָּל־הָאָדָם אֲשֶׁר נָתַן־לֹו הָאֱלֹהִים עֹשֶׁר וּנְכָסִים וְהִשְׁלִיטוֹ לֶאֱכֹל מִמֶּנּוּ וְלָשֵׂאת אֶת־חֶלְקוֹ וְלִשְׂמֹחַ בַּעֲמָלוֹ זֹה מַתַּת אֱלֹהִים הִיא׃
19 כִּי לֹא הַרְבֵּה יִזְכֹּר אֶת־יְמֵי חַיָּיו כִּי הָאֱלֹהִים מַעֲנֶה בְּשִׂמְחַת לִבּוֹ׃
Capítulo 6
La vanidad de las riquezas
LBLA
1 Hay un mal que he visto debajo del sol, y es frecuente entre los hombres:
2 Aquel a quien Dios da riquezas, bienes y honra, y nada le falta de todo lo que desea, pero Dios no le da facultad para comer de ello, sino que un extraño lo come. Esto es vanidad y grave mal.
3 Si un hombre engendra cien hijos, y vive muchos años, y los días de su edad son numerosos, pero su alma no se sacia del bien, y tampoco tiene sepultura, yo digo que un abortivo es mejor que él.
4 Porque en vano viene, y a las tinieblas va, y en tinieblas quedará su nombre.
5 Además, no vio el sol, ni conoció nada; más descanso tiene éste que aquél.
6 Aunque viva mil años dos veces, pero no goza del bien, ¿no van todos al mismo lugar?
7 Todo el trabajo del hombre es para su boca, y con todo, su deseo no se sacia.
8 Porque ¿qué más tiene el sabio que el necio? ¿Qué tiene el pobre que sabe andar delante de los vivos?
9 Mejor es lo que ven los ojos que el deseo que va tras lo superfluo. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.
10 Lo que es, ya ha sido nombrado, y se sabe que es hombre, y que no puede contender con el que es más fuerte que él.
11 Ciertamente las muchas palabras aumentan la vanidad. ¿Qué más tiene el hombre?
12 Porque ¿quién sabe lo que es bueno para el hombre durante los contados días de su vana vida, los cuales pasa como sombra? Porque ¿quién enseñará al hombre qué será después de él debajo del sol?
WLC
1 יֵשׁ רָעָה אֲשֶׁר רָאִיתִי תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ וְרַבָּה הִיא עַל־הָאָדָם׃
2 אִישׁ אֲשֶׁר יִתֶּן־לֹו הָאֱלֹהִים עֹשֶׁר וּנְכָסִים וְכָבוֹד וְאֵינֶנּוּ חָסֵר לְנַפְשׁוֹ מִכֹּל אֲשֶׁר יִתְאַוֶּה וְלֹא־יַשְׁלִיטֶנּוּ הָאֱלֹהִים לֶאֱכֹל מִמֶּנּוּ כִּי אִישׁ נָכְרִי יֹאכֲלֶנּוּ זֶה הֶבֶל וָחֳלִי רָע הוּא׃
3 אִם־יֹולִיד אִישׁ מֵאָה וְשָׁנִים רַבּוֹת יִחְיֶה וְרַב שֶׁיִּהְיוּ יְמֵי־שָׁנָיו וְנַפְשׁוֹ לֹא־תִשְׂבַּע מִן־הַטּוֹבָה וְגַם־קְבוּרָה לֹא־הָיְתָה לּוֹ אָמַרְתִּי טוֹב מִמֶּנּוּ הַנָּפֶל׃
4 כִּי־בַהֶבֶל בָּא וּבַחֹשֶׁךְ יֵלֵךְ וּבַחֹשֶׁךְ שְׁמוֹ יְכֻסֶּה׃
5 גַּם־שֶׁמֶשׁ לֹא־רָאָה וְלֹא יָדָע נַחַת לָזֶה מִזֶּה׃
6 וְאִלּוּ חָיָה אֶלֶף שָׁנִים פַּעֲמַיִם וְטוֹבָה לֹא רָאָה הֲלֹא אֶל־מָקוֹם אֶחָד הַכֹּל הוֹלֵךְ׃
7 כָּל־עֲמַל הָאָדָם לְפִיהוּ וְגַם־הַנֶּפֶשׁ לֹא תִמָּלֵא׃
8 כִּי מַה־יּוֹתֵר לֶחָכָם מִן־הַכְּסִיל מַה־לֶּעָנִי יוֹדֵעַ לַהֲלֹךְ נֶגֶד הַחַיִּים׃
9 טוֹב מַרְאֵה עֵינַיִם מֵהֲלָךְ־נָפֶשׁ גַּם־זֶה הֶבֶל וּרְעוּת רוּחַ׃
10 מַה־שֶּׁהָיָה כְּבָר נִקְרָא שְׁמוֹ וְנוֹדָע אֲשֶׁר־הוּא אָדָם וְלֹא־יוּכַל לָדִין עִם שהתקיף [שֶׁתַּקִּיף] מִמֶּנּוּ׃
11 כִּי יֵשׁ־דְּבָרִים הַרְבֵּה מַרְבִּים הָבֶל מַה־יֹּתֵר לָאָדָם׃
12 כִּי מִי יוֹדֵעַ מַה־טּוֹב לָאָדָם בַּחַיִּים מִסְפַּר יְמֵי־חַיֵּי הֶבְלֹו וְיַעֲשֵׂם כַּצֵּל אֲשֶׁר מִי־יַגִּיד לָאָדָם מַה־יִּהְיֶה אַחֲרָיו תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ׃
Capítulo 7
Proverbios de sabiduría
LBLA
1 Mejor es la buena fama que el buen ungüento, y el día de la muerte que el día del nacimiento.
2 Mejor es ir a la casa del luto que ir a la casa del banquete, porque aquello es el fin de todo hombre, y el que vive lo tomará a corazón.
3 Mejor es el pesar que la risa, porque con la tristeza del rostro se enmendará el corazón.
4 El corazón de los sabios está en la casa del luto, mas el corazón de los necios en la casa del placer.
5 Mejor es oír la reprensión del sabio que la canción de los necios.
6 Porque como crepitar de espinos debajo de una olla, así es la risa del necio; también esto es vanidad.
7 Ciertamente la opresión hace entontecer al sabio, y el soborno corrompe el corazón.
8 Mejor es el fin de un asunto que su principio; mejor es el paciente de espíritu que el altivo de espíritu.
9 No te apresures en tu espíritu a enojarte, porque el enojo reposa en el seno de los necios.
10 Nunca digas: ¿Cuál es la causa de que los tiempos pasados fueron mejores que estos? Porque nunca de esto preguntarás con sabiduría.
11 Buena es la sabiduría con herencia, y provechosa para los que ven el sol.
12 Porque la sabiduría protege como el dinero protege; pero la ventaja del conocimiento es que la sabiduría da vida a sus poseedores.
13 Mira la obra de Dios; porque ¿quién podrá enderezar lo que él torció?
14 En el día del bien goza del bien; y en el día de la adversidad considera. Dios hizo tanto lo uno como lo otro, a fin de que el hombre nada halle después de él.
15 Todo esto he visto en los días de mi vanidad: Justo que perece en su justicia, y malvado que en su maldad alarga sus días.
16 No seas demasiado justo, ni seas sabio con exceso; ¿por qué habrás de destruirte?
17 No hagas mucho mal, ni seas necio; ¿por qué habrás de morir antes de tu tiempo?
18 Bueno es que tomes esto, y también de aquello no apartes tu mano; porque aquel que a Dios teme, saldrá bien en todo.
19 La sabiduría fortalece al sabio más que diez poderosos que haya en una ciudad.
20 Ciertamente no hay hombre justo en la tierra que haga el bien y nunca peque.
21 No apliques tu corazón a todas las cosas que se hablan, para que no oigas a tu siervo cuando te maldice;
22 porque tu corazón sabe que tú también has maldecido a otros muchas veces.
23 Todo esto lo he probado con sabiduría. Dije: Seré sabio, pero ella se alejó de mí.
24 Lejos está lo que fue; y lo muy profundo, ¿quién lo hallará?
25 Me volví yo, y dispuse mi corazón a saber, y a escudriñar, y a buscar sabiduría y la razón de las cosas, y a conocer la maldad de la necedad y la insensatez de la locura.
26 Y he hallado más amarga que la muerte a la mujer cuyo corazón es lazos y redes, y sus manos ligaduras. El que agrada a Dios escapará de ella; mas el pecador será preso en ella.
27 He aquí, esto he hallado, dice el Predicador, pesando las cosas una por una para hallar la razón;
28 lo que aún busca mi alma, y no he hallado. Un hombre entre mil he hallado, pero mujer entre todas estas no he hallado.
29 He aquí, solamente esto he hallado: que Dios hizo al hombre recto, pero ellos buscaron muchas perversiones.
WLC
1 טוֹב שֵׁם מִשֶּׁמֶן טוֹב וְיוֹם הַמָּוֶת מִיּוֹם הִוָּלְדוֹ׃
2 טוֹב לָלֶכֶת אֶל־בֵּית־אֵבֶל מִלֶּכֶת אֶל־בֵּית מִשְׁתֶּה בַּאֲשֶׁר הוּא סוֹף כָּל־הָאָדָם וְהַחַי יִתֵּן אֶל־לִבּוֹ׃
3 טוֹב כַּעַס מִשְּׂחֹק כִּי־בְרֹעַ פָּנִים יִיטַב לֵב׃
4 לֵב חֲכָמִים בְּבֵית אֵבֶל וְלֵב כְּסִילִים בְּבֵית שִׂמְחָה׃
5 טוֹב לִשְׁמֹעַ גַּעֲרַת חָכָם מֵאִישׁ שֹׁמֵעַ שִׁיר כְּסִילִים׃
6 כִּי כְקוֹל הַסִּירִים תַּחַת הַסִּיר כֵּן שְׂחֹק הַכְּסִיל וְגַם־זֶה הָבֶל׃
7 כִּי הָעֹשֶׁק יְהוֹלֵל חָכָם וִיאַבֵּד אֶת־לֵב מַתָּנָה׃
8 טוֹב אַחֲרִית דָּבָר מֵרֵאשִׁיתוֹ טוֹב אֶרֶךְ־רוּחַ מִגְּבַהּ־רוּחַ׃
9 אַל־תְּבַהֵל בְּרוּחֲךָ לִכְעוֹס כִּי כַעַס בְּחֵיק כְּסִילִים יָנוּחַ׃
10 אַל־תֹּאמַר מֶה הָיָה שֶׁהַיָּמִים הָרִאשֹׁנִים הָיוּ טוֹבִים מֵאֵלֶּה כִּי לֹא מֵחָכְמָה שָׁאַלְתָּ עַל־זֶה׃
11 טוֹבָה חָכְמָה עִם־נַחֲלָה וְיֹתֵר לְרֹאֵי הַשָּׁמֶשׁ׃
12 כִּי בְּצֵל הַחָכְמָה בְּצֵל הַכָּסֶף וְיִתְרֹון דַּעַת הַחָכְמָה תְּחַיֶּה בְעָלֶיהָ׃
13 רְאֵה אֶת־מַעֲשֵׂה הָאֱלֹהִים כִּי מִי יוּכַל לְתַקֵּן אֵת אֲשֶׁר עִוְּתֹו׃
14 בְּיֹום טוֹבָה הֱיֵה בְטוֹב וּבְיֹום רָעָה רְאֵה גַּם אֶת־זֶה לְעֻמַּת־זֶה עָשָׂה הָאֱלֹהִים עַל־דִּבְרַת שֶׁלֹּא יִמְצָא הָאָדָם אַחֲרָיו מְאוּמָה׃
15 אֶת־הַכֹּל רָאִיתִי בִּימֵי הֶבְלִי יֵשׁ צַדִּיק אֹבֵד בְּצִדְקוֹ וְיֵשׁ רָשָׁע מַאֲרִיךְ בְּרָעָתוֹ׃
16 אַל־תְּהִי צַדִּיק הַרְבֵּה וְאַל־תִּתְחַכַּם יוֹתֵר לָמָּה תִּשּׁוֹמֵם׃
17 אַל־תִּרְשַׁע הַרְבֵּה וְאַל־תְּהִי סָכָל לָמָּה תָמוּת בְּלֹא עִתֶּךָ׃
18 טוֹב אֲשֶׁר תֶּאֱחֹז בָּזֶה וְגַם־מִזֶּה אַל־תַּנַּח אֶת־יָדֶךָ כִּי־יְרֵא אֱלֹהִים יֵצֵא אֶת־כֻּלָּם׃
19 הַחָכְמָה תָּעֹז לֶחָכָם מֵעֲשָׂרָה שַׁלִּיטִים אֲשֶׁר הָיוּ בָּעִיר׃
20 כִּי אָדָם אֵין צַדִּיק בָּאָרֶץ אֲשֶׁר יַעֲשֶׂה־טּוֹב וְלֹא יֶחֱטָא׃
21 גַּם לְכָל־הַדְּבָרִים אֲשֶׁר יְדַבֵּרוּ אַל־תִּתֵּן לִבֶּךָ אֲשֶׁר לֹא־תִשְׁמַע אֶת־עַבְדְּךָ מְקַלְלֶךָ׃
22 כִּי גַּם־פְּעָמִים רַבּוֹת יָדַע לִבֶּךָ אֲשֶׁר גַּם־אַתָּה קִלַּלְתָּ אֲחֵרִים׃
23 כָּל־זֹה נִסִּיתִי בַחָכְמָה אָמַרְתִּי אֶחְכָּמָה וְהִיא רְחוֹקָה מִמֶּנִּי׃
24 רָחוֹק מַה־שֶּׁהָיָה וְעָמֹק עָמֹק מִי יִמְצָאֶנּוּ׃
25 סַבּוֹתִי אֲנִי וְלִבִּי לָדַעַת וְלָתוּר וּבַקֵּשׁ חָכְמָה וְחֶשְׁבּוֹן וְלָדַעַת רֶשַׁע כֶּסֶל וְהַסִּכְלוּת הוֹלֵלֹות׃
26 וּמוֹצֶא אֲנִי מַר מִמָּוֶת אֶת־הָאִשָּׁה אֲשֶׁר־הִיא מְצוֹדִים וַחֲרָמִים לִבָּהּ אֲסוּרִים יָדֶיהָ טוֹב לִפְנֵי הָאֱלֹהִים יִמָּלֵט מִמֶּנָּה וְחוֹטֵא יִלָּכֶד בָּהּ׃
27 רְאֵה זֶה מָצָאתִי אָמְרָה קֹהֶלֶת אַחַת לְאַחַת לִמְצֹא חֶשְׁבּוֹן׃
28 אֲשֶׁר עוֹד־בִּקְשָׁה נַפְשִׁי וְלֹא מָצָאתִי אָדָם אֶחָד מֵאֶלֶף מָצָאתִי וְאִשָּׁה בְכָל־אֵלֶּה לֹא מָצָאתִי׃
29 לְבַד רְאֵה־זֶה מָצָאתִי אֲשֶׁר עָשָׂה הָאֱלֹהִים אֶת־הָאָדָם יָשָׁר וְהֵמָּה בִקְשׁוּ חִשְּׁבֹנוֹת רַבִּים׃
Capítulo 8
La sabiduría y el poder del rey
LBLA
1 ¿Quién como el sabio? ¿Y quién conoce la interpretación de las cosas? La sabiduría del hombre ilumina su rostro, y la tosquedad de su semblante se cambia.
2 Yo digo: Guarda el mandamiento del rey, y esto en atención al juramento de Dios.
3 No te apresures a irte de su presencia; no persistas en cosa mala, porque él hará todo lo que quiera.
4 Pues la palabra del rey es con autoridad; ¿quién le dirá: Qué haces?
5 El que guarda el mandamiento no experimentará mal; y el corazón del sabio conoce el tiempo y el juicio.
6 Porque para todo lo que quisiera hay tiempo y juicio, aunque la miseria del hombre es grande sobre él.
7 Porque no sabe lo que ha de ser; pues cuando suceda, ¿quién se lo hará saber?
8 No hay hombre que tenga potestad sobre el espíritu para retener el espíritu, ni potestad sobre el día de la muerte; y no vale armamento en la guerra, ni la impiedad librará al que la posee.
9 Todo esto he visto, y he puesto mi corazón en todo lo que se hace debajo del sol; hay tiempo en que el hombre se enseñorea del hombre para mal suyo.
10 Asimismo he visto a los impíos sepultados con honra; mas los que habían actuado santamente fueron llevados de lugar santo, y fueron olvidados en la ciudad. También esto es vanidad.
11 Por cuanto no se ejecuta luego sentencia sobre la mala obra, el corazón de los hijos de los hombres está en ellos dispuesto para hacer el mal.
12 Aunque el pecador haga mal cien veces, y prolongue sus días, con todo yo también sé que les irá bien a los que a Dios temen, los que temen ante su presencia.
13 Pero al impío no le irá bien, ni le serán prolongados los días, que son como sombra; por cuanto no teme delante de la presencia de Dios.
14 Hay una vanidad que se hace sobre la tierra: que hay justos a quienes sucede como si hicieran obras de impíos, y hay impíos a quienes sucede como si hicieran obras de justos. Digo que esto también es vanidad.
15 Por tanto, alabé yo la alegría; porque no hay para el hombre bien debajo del sol, sino que coma, y beba, y se alegre; y esto le acompañará en su trabajo los días de su vida que Dios le da debajo del sol.
16 Cuando dediqué mi corazón a conocer sabiduría, y a ver la faena que se hace sobre la tierra (pues ni de día ni de noche ve el sueño los ojos del hombre),
17 entonces vi toda la obra de Dios, que el hombre no puede alcanzar la obra que se hace debajo del sol; por mucho que trabaje el hombre buscándola, no la hallará; aunque diga el sabio que la conoce, no por eso podrá alcanzarla.
WLC
1 מִי כְּהֶחָכָם וּמִי יוֹדֵעַ פֵּשֶׁר דָּבָר חָכְמַת אָדָם תָּאִיר פָּנָיו וְעֹז פָּנָיו יְשֻׁנֶּא׃
2 אֲנִי פִּי־מֶלֶךְ שְׁמֹור וְעַל דִּבְרַת שְׁבוּעַת אֱלֹהִים׃
3 אַל־תִּבָּהֵל מִפָּנָיו תֵּלֵךְ אַל־תַּעֲמֹד בְּדָבָר רָע כִּי כָּל־אֲשֶׁר יַחְפֹּץ יַעֲשֶׂה׃
4 בַּאֲשֶׁר דְּבַר־מֶלֶךְ שִׁלְטֹון וּמִי יֹאמַר־לֹו מַה־תַּעֲשֶׂה׃
5 שׁוֹמֵר מִצְוָה לֹא יֵדַע דָּבָר רָע וְעֵת וּמִשְׁפָּט יֵדַע לֵב חָכָם׃
6 כִּי לְכָל־חֵפֶץ יֵשׁ עֵת וּמִשְׁפָּט כִּי־רָעַת הָאָדָם רַבָּה עָלָיו׃
7 כִּי־אֵינֶנּוּ יֹדֵעַ מַה־שֶּׁיִּהְיֶה כִּי כַּאֲשֶׁר יִהְיֶה מִי יַגִּיד לֹו׃
8 אֵין אָדָם שַׁלִּיט בָּרוּחַ לִכְלוֹא אֶת־הָרוּחַ וְאֵין שִׁלְטוֹן בְּיוֹם הַמָּוֶת וְאֵין מִשְׁלַחַת בַּמִּלְחָמָה וְלֹא־יְמַלֵּט רֶשַׁע אֶת־בְּעָלָיו׃
9 אֶת־כָּל־זֶה רָאִיתִי וְנָתוֹן אֶת־לִבִּי לְכָל־מַעֲשֶׂה אֲשֶׁר נַעֲשָׂה תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ עֵת אֲשֶׁר שָׁלַט הָאָדָם בְּאָדָם לְרַע לֹו׃
10 וּבְכֵן רָאִיתִי רְשָׁעִים קְבֻרִים וָבָאוּ וּמִמְּקוֹם קָדֹשׁ יְהַלֵּכוּ וְיִשְׁתַּכְּחוּ בָעִיר אֲשֶׁר כֵּן־עָשׂוּ גַּם־זֶה הָבֶל׃
11 אֲשֶׁר אֵין־נַעֲשָׂה פִתְגָם מַעֲשֵׂה הָרָעָה מְהֵרָה עַל־כֵּן מָלֵא לֵב בְּנֵי־הָאָדָם בָּהֶם לַעֲשׂוֹת רָע׃
12 אֲשֶׁר חֹטֶא עֹשֶׂה רָע מְאַת וּמַאֲרִיךְ לוֹ כִּי גַּם־יוֹדֵעַ אָנִי אֲשֶׁר יִהְיֶה־טּוֹב לְיִרְאֵי הָאֱלֹהִים אֲשֶׁר יִירְאוּ מִלְּפָנָיו׃
13 וְטוֹב לֹא־יִהְיֶה לָרָשָׁע וְלֹא־יַאֲרִיךְ יָמִים כַּצֵּל אֲשֶׁר אֵינֶנּוּ יָרֵא מִלִּפְנֵי אֱלֹהִים׃
14 יֶשׁ־הֶבֶל אֲשֶׁר נַעֲשָׂה עַל־הָאָרֶץ אֲשֶׁר יֵשׁ צַדִּיקִים אֲשֶׁר מַגִּיעַ אֲלֵהֶם כְּמַעֲשֵׂה הָרְשָׁעִים וְיֵשׁ רְשָׁעִים שֶׁמַּגִּיעַ אֲלֵהֶם כְּמַעֲשֵׂה הַצַּדִּיקִים אָמַרְתִּי שֶׁגַּם־זֶה הָבֶל׃
15 וְשִׁבַּחְתִּי אֲנִי אֶת־הַשִּׂמְחָה אֲשֶׁר אֵין־טוֹב לָאָדָם תַּחַת הַשֶּׁמֶשׁ כִּי אִם־לֶאֱכֹל וְלִשְׁתּוֹת וְלִשְׂמֹוחַ וְהוּא יִלְוֶנּוּ בַעֲמָלוֹ יְמֵי חַיָּיו אֲשֶׁר־נָתַן־לֹו הָאֱלֹהִים תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ׃
16 כַּאֲשֶׁר נָתַתִּי אֶת־לִבִּי לָדַעַת חָכְמָה וְלִרְאוֹת אֶת־הָעִנְיָן אֲשֶׁר נַעֲשָׂה עַל־הָאָרֶץ כִּי גַם בַּיּוֹם וּבַלַּיְלָה שֵׁנָה בְּעֵינָיו אֵינֶנּוּ רֹאֶה׃
17 וְרָאִיתִי אֶת־כָּל־מַעֲשֵׂה הָאֱלֹהִים כִּי לֹא יוּכַל הָאָדָם לְמָצוֹא אֶת־הַמַּעֲשֶׂה אֲשֶׁר נַעֲשָׂה תַחַת־הַשֶּׁמֶשׁ בְּשֶׁל אֲשֶׁר יַעֲמֹל הָאָדָם לְבַקֵּשׁ וְלֹא יִמְצָא וְגַם אִם־יֹאמַר הֶחָכָם לָדַעַת לֹא יוּכַל לִמְצֹא׃
Capítulo 9
El mismo fin para todos
LBLA
1 Ciertamente he dado mi corazón a todas estas cosas, para declarar todo esto: que los justos y los sabios, y sus obras, están en la mano de Dios; y que amor u odio, no lo sabe el hombre; todo está delante de ellos.
2 Todo acontece de la misma manera a todos; un mismo suceso ocurre al justo y al impío; al bueno, al limpio y al no limpio; al que sacrifica, y al que no sacrifica; como al bueno, así al que peca; al que jura, como al que teme el juramento.
3 Este mal hay entre todo lo que se hace debajo del sol, que un mismo suceso ocurre a todos, y también que el corazón de los hijos de los hombres está lleno de mal, y de insensatez en su corazón durante su vida; y después de esto se van a los muertos.
4 Aún hay esperanza para todo aquel que está entre los vivos; porque mejor es perro vivo que león muerto.
5 Porque los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben, ni tienen más paga; porque su memoria es puesta en olvido.
6 También su amor y su odio y su envidia fenecieron ya; y nunca más tendrán parte en todo lo que se hace debajo del sol.
7 Anda, come tu pan con gozo, y bebe tu vino con alegre corazón; porque tus obras ya son agradables a Dios.
8 En todo tiempo sean blancos tus vestidos, y nunca falte ungüento sobre tu cabeza.
9 Goza de la vida con la mujer que amas, todos los días de la vida de tu vanidad que te son dados debajo del sol, todos los días de tu vanidad; porque esta es tu parte en la vida, y en tu trabajo con que te afanas debajo del sol.
10 Todo lo que te viniere a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque en el Seol, adonde vas, no hay obra, ni trabajo, ni ciencia, ni sabiduría.
11 Me volví y vi debajo del sol, que no es de los ligeros la carrera, ni la guerra de los valientes, ni aun de los sabios el pan, ni de los prudentes las riquezas, ni de los elocuentes el favor; sino que tiempo y ocasión acontecen a todos.
12 Porque el hombre tampoco conoce su tiempo; como los peces que son presos en la mala red, y como las aves que se enredan en lazo, así son enlazados los hijos de los hombres en el tiempo malo, cuando cae de repente sobre ellos.
13 También vi esta sabiduría debajo del sol, la cual me parece grande:
14 Una pequeña ciudad, y pocos hombres en ella; y viene contra ella un gran rey, y la asedia y levanta contra ella grandes baluartes;
15 y se halla en ella un hombre pobre, sabio, el cual libra la ciudad con su sabiduría; y nadie se acordaba de aquel hombre pobre.
16 Entonces dije yo: Mejor es la sabiduría que la fuerza, aunque la sabiduría del pobre sea menospreciada, y no sean escuchadas sus palabras.
17 Las palabras del sabio en quietud se oyen más que el clamor del señor entre los necios.
18 Mejor es la sabiduría que las armas de guerra; pero un pecador destruye mucho bien.
WLC
1 כִּי אֶת־כָּל־זֶה נָתַתִּי אֶל־לִבִּי וְלָבוּר אֶת־כָּל־זֶה אֲשֶׁר הַצַּדִּיקִים וְהַחֲכָמִים וַעֲבָדֵיהֶם בְּיַד הָאֱלֹהִים גַּם־אַהֲבָה גַם־שִׂנְאָה אֵין יֹודֵעַ הָאָדָם הַכֹּל לִפְנֵיהֶם׃
2 הַכֹּל כַּאֲשֶׁר לַכֹּל מִקְרֶה אֶחָד לַצַּדִּיק וְלָרָשָׁע לַטּוֹב וְלַטָּהוֹר וְלַטָּמֵא וְלַזֹּבֵחַ וְלַאֲשֶׁר אֵינֶנּוּ זֹבֵחַ כַּטּוֹב כַּחֹטֶא הַנִּשְׁבָּע כַּאֲשֶׁר שְׁבוּעָה יָרֵא׃
3 זֶה רָע בְּכֹל אֲשֶׁר־נַעֲשָׂה תַּחַת הַשֶּׁמֶשׁ כִּי־מִקְרֶה אֶחָד לַכֹּל וְגַם לֵב בְּנֵי־הָאָדָם מָלֵא־רָע וְהוֹלֵלֹות בִּלְבָבָם בְּחַיֵּיהֶם וְאַחֲרָיו אֶל־הַמֵּתִים׃
4 כִּי־מִי אֲשֶׁר יבחר [יְחֻבַּר] אֶל כָּל־הַחַיִּים יֵשׁ בִּטָּחוֹן כִּי־לְכֶלֶב חַי הוּא טוֹב מִן־הָאַרְיֵה הַמֵּת׃
5 כִּי הַחַיִּים יוֹדְעִים שֶׁיָּמֻתוּ וְהַמֵּתִים אֵינָם יוֹדְעִים מְאוּמָה וְאֵין־עוֹד לָהֶם שָׂכָר כִּי נִשְׁכַּח זִכְרָם׃
6 גַּם אַהֲבָתָם גַּם־שִׂנְאָתָם גַּם־קִנְאָתָם כְּבָר אָבָדָה וְחֵלֶק אֵין־לָהֶם עוֹד לְעוֹלָם בְּכֹל אֲשֶׁר־נַעֲשָׂה תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ׃
7 לֵךְ אֱכֹל בְּשִׂמְחָה לַחְמֶךָ וּשֲׁתֵה בְלֶב־טוֹב יֵינֶךָ כִּי כְבָר רָצָה הָאֱלֹהִים אֶת־מַעֲשֶׂיךָ׃
8 בְּכָל־עֵת יִהְיוּ בְגָדֶיךָ לְבָנִים וְשֶׁמֶן עַל־רֹאשְׁךָ אַל־יֶחְסָר׃
9 רְאֵה חַיִּים עִם־אִשָּׁה אֲשֶׁר־אָהַבְתָּ כָּל־יְמֵי חַיֵּי הֶבְלֶךָ אֲשֶׁר נָתַן־לְךָ תַּחַת הַשֶּׁמֶשׁ כֹּל יְמֵי הֶבְלֶךָ כִּי הוּא חֶלְקְךָ בַּחַיִּים וּבַעֲמָלְךָ אֲשֶׁר־אַתָּה עָמֵל תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ׃
10 כֹּל אֲשֶׁר תִּמְצָא יָדְךָ לַעֲשׂוֹת בְּכֹחֲךָ עֲשֵׂה כִּי אֵין מַעֲשֶׂה וְחֶשְׁבּוֹן וְדַעַת וְחָכְמָה בִּשְׁאוֹל אֲשֶׁר אַתָּה הֹלֵךְ שָׁמָּה׃
11 שַׁבְתִּי וְרָאֹה תַחַת־הַשֶּׁמֶשׁ כִּי לֹא לַקַּלִּים הַמֵּרוֹץ וְלֹא לַגִּבּוֹרִים הַמִּלְחָמָה וְגַם לֹא לַחֲכָמִים לֶחֶם וְגַם לֹא לַנְּבֹנִים עֹשֶׁר וְגַם לֹא לַיֹּדְעִים חֵן כִּי־עֵת וָפֶגַע יִקְרֶה אֶת־כֻּלָּם׃
12 כִּי גַּם לֹא־יֵדַע הָאָדָם אֶת־עִתּוֹ כַּדָּגִים שֶׁנֶּאֱחָזִים בִּמְצוֹדָה רָעָה וְכַצִּפֳּרִים הָאֲחֻזוֹת בַּפָּח כָּהֵם יוּקָשִׁים בְּנֵי הָאָדָם לְעֵת רָעָה כְּשֶׁתִּפּוֹל עֲלֵיהֶם פִּתְאֹם׃
13 גַּם־זֹה רָאִיתִי חָכְמָה תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ וּגְדוֹלָה הִיא אֵלָי׃
14 עִיר קְטַנָּה וַאֲנָשִׁים בָּהּ מְעָט וּבָא־אֵלֶיהָ מֶלֶךְ גָּדוֹל וְסָבַב אֹתָהּ וּבָנָה עָלֶיהָ מְצוֹדִים גְּדֹלִים׃
15 וּמָצָא בָהּ אִישׁ מִסְכֵּן חָכָם וּמִלַּט־הוּא אֶת־הָעִיר בְּחָכְמָתוֹ וְאָדָם לֹא זָכַר אֶת־הָאִישׁ הַמִּסְכֵּן הַהוּא׃
16 וְאָמַרְתִּי אָנִי טוֹבָה חָכְמָה מִגְּבוּרָה וְחָכְמַת הַמִּסְכֵּן בְּזוּיָה וּדְבָרָיו אֵינָם נִשְׁמָעִים׃
17 דִּבְרֵי חֲכָמִים בְּנַחַת נִשְׁמָעִים מִזַּעֲקַת מוֹשֵׁל בַּכְּסִילִים׃
18 טוֹבָה חָכְמָה מִכְּלֵי קְרָב וְחֹטֶא אֶחָד יְאַבֵּד טוֹבָה הַרְבֵּה׃
Capítulo 10
Proverbios sobre la sabiduría
LBLA
1 Las moscas muertas hacen heder y dar mal olor al perfume del perfumista; así una pequeña locura, al que es estimado como sabio y honorable.
2 El corazón del sabio está a su mano derecha, mas el corazón del necio a su mano izquierda.
3 Y aun cuando el necio va por el camino, le falta entendimiento, y dice a todos que es necio.
4 Si el espíritu del príncipe se exaltare contra ti, no dejes tu lugar; porque la mansedumbre hará cesar grandes ofensas.
5 Hay un mal que he visto debajo del sol, a manera de error emanado del príncipe:
6 La necedad está colocada en grandes alturas, y los ricos están sentados en lugar bajo.
7 He visto siervos a caballo, y príncipes que andaban como siervos sobre la tierra.
8 El que hiciere hoyo, caerá en él; y al que aportillare vallado, le morderá la serpiente.
9 El que corta piedras se lastima con ellas; y el que parte leña, en ello peligra.
10 Si se embotare el hierro, y su filo no fuere amolado, hay que añadir entonces más fuerza; pero la sabiduría es provechosa para dirigir.
11 Si la serpiente muerde antes de ser hechizada, no hay ventaja en el encantador.
12 Las palabras de la boca del sabio son llenas de gracia, mas los labios del necio causarán su propia ruina.
13 El principio de las palabras de su boca es necedad; y el fin de su charla, perversa locura.
14 El necio multiplica palabras, aunque no sabe nadie lo que ha de ser; ¿y quién le hará saber lo que después de él será?
15 El trabajo del necio lo fatiga, porque no sabe ir a la ciudad.
16 ¡Ay de ti, tierra, cuando tu rey es muchacho, y tus príncipes banquetean de mañana!
17 Bienaventurada tú, tierra, cuando tu rey es hijo de nobles, y tus príncipes comen a su hora, para reponer sus fuerzas y no por embriaguez.
18 Por la pereza se cae el techo, y por la flojedad de las manos la casa gotea.
19 Para reír preparan pan y vino, que alegran la vida; y el dinero responde a todo.
20 Ni aun en tu pensamiento maldigas al rey, ni en lo secreto de tu cámara maldigas al rico; porque las aves del cielo llevarán la voz, y las que tienen alas harán saber la palabra.
WLC
1 זְבוּבֵי מָוֶת יַבְאִישׁ יַבִּיעַ שֶׁמֶן רוֹקֵחַ יָקָר מֵחָכְמָה מִכָּבוֹד סִכְלוּת מְעָט׃
2 לֵב חָכָם לִימִינוֹ וְלֵב כְּסִיל לִשְׂמֹאלוֹ׃
3 וְגַם־בַּדֶּרֶךְ כְּשֶׁהַכְּסִיל הֹלֵךְ לִבּוֹ חָסֵר וְאָמַר לַכֹּל כְּסִיל הוּא׃
4 אִם־רוּחַ הַמּוֹשֵׁל תַּעֲלֶה עָלֶיךָ מְקוֹמְךָ אַל־תַּנַּח כִּי מַרְפֵּא יַנִּיחַ חֲטָאִים גְּדֹלִים׃
5 יֵשׁ רָעָה רָאִיתִי תַּחַת הַשָּׁמֶשׁ כִּשְׁגָגָה שֶׁיֹּצָא מִלִּפְנֵי הַשַּׁלִּיט׃
6 נִתַּן הַסֶּכֶל בַּמְּרוֹמִים רַבִּים וַעֲשִׁירִים בַּשֵּׁפֶל יֵשֵׁבוּ׃
7 רָאִיתִי עֲבָדִים עַל־סוּסִים וְשָׂרִים הֹלְכִים כַּעֲבָדִים עַל־הָאָרֶץ׃
8 חֹפֵר גּוּמָּץ בּוֹ יִפֹּול וּפֹרֵץ גָּדֵר יִשְּׁכֶנּוּ נָחָשׁ׃
9 מַסִּיעַ אֲבָנִים יֵעָצֵב בָּהֶם בּוֹקֵעַ עֵצִים יִסָּכֶן בָּם׃
10 אִם־קֵהָה הַבַּרְזֶל וְהוּא לֹא־פָנִים קִלְקַל וַחֲיָלִים יְגַבֵּר וְיִתְרֹון הַכְשֵׁיר חָכְמָה׃
11 אִם־יִשֹּׁךְ הַנָּחָשׁ בְּלוֹא לָחַשׁ וְאֵין יִתְרֹון לְבַעַל הַלָּשֹׁון׃
12 דִּבְרֵי פִי־חָכָם חֵן וְשִׂפְתוֹת כְּסִיל תְּבַלְּעֶנּוּ׃
13 תְּחִלַּת דִּבְרֵי־פִיהוּ סִכְלוּת וְאַחֲרִית פִּיהוּ הוֹלֵלוּת רָעָה׃
14 וְהַסָּכָל יַרְבֶּה דְבָרִים לֹא־יֵדַע הָאָדָם מַה־שֶּׁיִּהְיֶה וַאֲשֶׁר יִהְיֶה מֵאַחֲרָיו מִי יַגִּיד לֹו׃
15 עֲמַל הַכְּסִילִים תְּיַגְּעֶנּוּ אֲשֶׁר לֹא־יָדַע לָלֶכֶת אֶל־עִיר׃
16 אִי־לָךְ אֶרֶץ שֶׁמַּלְכֵּךְ נָעַר וְשָׂרַיִךְ בַּבֹּקֶר יֹאכֵלוּ׃
17 אַשְׁרֵיךְ אֶרֶץ שֶׁמַּלְכֵּךְ בֶּן־חוֹרִים וְשָׂרַיִךְ בָּעֵת יֹאכֵלוּ בִּגְבוּרָה וְלֹא בַשְּׁתִי׃
18 בַּעֲצַלְתַּיִם יִמַּךְ הַמְּקָרֶה וּבְשִׁפְלוּת יָדַיִם יִדְלֹף הַבָּיִת׃
19 לִשְׂחוֹק עֹשִׂים לֶחֶם וְיַיִן יְשַׂמַּח חַיִּים וְהַכֶּסֶף יַעֲנֶה אֶת־הַכֹּל׃
20 גַּם בְּמַדָּעֲךָ מֶלֶךְ אַל־תְּקַלֵּל וּבְחַדְרֵי מִשְׁכָּבְךָ אַל־תְּקַלֵּל עָשִׁיר כִּי עוֹף הַשָּׁמַיִם יוֹלִיךְ אֶת־הַקּוֹל וּבַעַל הכנפים [כְּנָפַיִם] יַגֵּיד דָּבָר׃
Capítulo 11
Consejos para la vida
LBLA
1 Echa tu pan sobre las aguas, que después de muchos días lo hallarás.
2 Reparte a siete, y aun a ocho, porque no sabes qué mal habrá sobre la tierra.
3 Si las nubes están llenas, derramarán lluvia sobre la tierra; y si el árbol cae hacia el sur o hacia el norte, en el lugar donde el árbol caiga, allí quedará.
4 El que al viento observa, no sembrará; y el que mira a las nubes, no segará.
5 Como tú no sabes cuál es el camino del viento, o cómo crecen los huesos en el vientre de la mujer encinta, así ignoras la obra de Dios, el cual hace todas las cosas.
6 Por la mañana siembra tu semilla, y a la tarde no dejes reposar tu mano; porque no sabes cuál es lo mejor, si esto o aquello, o si lo uno y lo otro es igualmente bueno.
7 Dulce es la luz, y agradable a los ojos ver el sol.
8 Ciertamente, si el hombre viviere muchos años, en todos ellos debe alegrarse; pero debe acordarse de los días de oscuridad, que serán muchos. Todo cuanto viene es vanidad.
9 Alégrate, joven, en tu juventud, y tome placer tu corazón en los días de tu adolescencia; y anda en los caminos de tu corazón y en la vista de tus ojos; pero sabe, que sobre todas estas cosas te juzgará Dios.
10 Quita, pues, de tu corazón el enojo, y aparta de tu carne el mal; porque la adolescencia y la juventud son vanidad.
WLC
1 שַׁלַּח לַחְמְךָ עַל־פְּנֵי הַמָּיִם כִּי־בְרֹב הַיָּמִים תִּמְצָאֶנּוּ׃
2 תֶּן־חֵלֶק לְשִׁבְעָה וְגַם לִשְׁמֹונָה כִּי לֹא תֵדַע מַה־יִּהְיֶה רָעָה עַל־הָאָרֶץ׃
3 אִם־יִמָּלְאוּ הֶעָבִים גֶּשֶׁם עַל־הָאָרֶץ יָרִיקוּ וְאִם־יִפֹּול עֵץ בַּדָּרֹום וְאִם בַּצָּפֹון מְקֹום שֶׁיִּפֹּול הָעֵץ שָׁם יְהוּא׃
4 שֹׁמֵר רוּחַ לֹא יִזְרָע וְרֹאֶה בֶעָבִים לֹא יִקְצֹור׃
5 כַּאֲשֶׁר אֵינְךָ יֹודֵעַ מַה־דֶּרֶךְ הָרוּחַ כַּעֲצָמִים בְּבֶטֶן הַמְּלֵאָה כָּכָה לֹא תֵדַע אֶת־מַעֲשֵׂה הָאֱלֹהִים אֲשֶׁר יַעֲשֶׂה אֶת־הַכֹּל׃
6 בַּבֹּקֶר זְרַע אֶת־זַרְעֶךָ וְלָעֶרֶב אַל־תַּנַּח יָדֶךָ כִּי אֵינְךָ יֹודֵעַ אֵי זֶה יִכְשָׁר הֲזֶה אוֹ־זֶה וְאִם־שְׁנֵיהֶם כְּאֶחָד טֹובִים׃
7 וּמָתֹוק הָאֹור וְטֹוב לַעֵינַיִם לִרְאֹות אֶת־הַשָּׁמֶשׁ׃
8 כִּי אִם־שָׁנִים הַרְבֵּה יִחְיֶה הָאָדָם בְּכֻלָּם יִשְׂמָח וְיִזְכֹּר אֶת־יְמֵי הַחֹשֶׁךְ כִּי־הַרְבֵּה יִהְיוּ כָּל־שֶׁבָּא הֶבֶל׃
9 שְׂמַח בָּחוּר בְּיַלְדוּתֶיךָ וִיטִיבְךָ לִבְּךָ בִּימֵי בְחוּרֹותֶיךָ וְהַלֵּךְ בְּדַרְכֵי לִבְּךָ וּבְמַרְאֵי עֵינֶיךָ וְדָע כִּי עַל־כָּל־אֵלֶּה יְבִיאֲךָ הָאֱלֹהִים בַּמִּשְׁפָּט׃
10 וְהָסֵר כַּעַס מִלִּבֶּךָ וְהַעֲבֵר רָעָה מִבְּשָׂרֶךָ כִּי־הַיַּלְדוּת וְהַשַּׁחֲרוּת הָבֶל׃
Capítulo 12
Conclusión del Predicador
LBLA
1 Acuérdate también de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, y lleguen los años en que digas: No tengo en ellos contentamiento;
2 antes que se oscurezcan el sol y la luz, la luna y las estrellas, y vuelvan las nubes tras la lluvia;
3 el día que tiemblen los guardas de la casa, y se doblen los hombres fuertes, y cesen las que muelen por ser pocas, y se oscurezcan los que miran por las ventanas;
4 y las puertas de la calle se cierren cuando baje el ruido del molino, y uno se levante al canto del ave, y todas las hijas del canto sean abatidas;
5 cuando también teman las alturas, y haya terrores en el camino; y florezca el almendro, y la langosta sea una carga, y se pierda el apetito; porque el hombre va a su morada eterna, y los dolientes andarán alrededor por la calle;
6 antes que el cordón de plata se rompa, y el tazón de oro se quiebre, y el cántaro se rompa junto a la fuente, y la rueda se quiebre sobre el pozo;
7 y el polvo vuelva a la tierra como era, y el espíritu vuelva a Dios que lo dio.
8 Vanidad de vanidades, dice el Predicador, todo es vanidad.
9 Y además de ser sabio el Predicador, también enseñó sabiduría al pueblo; y escudriñó, investigó y compuso muchos proverbios.
10 El Predicador procuró hallar palabras agradables y escribir palabras correctas, palabras de verdad.
11 Las palabras de los sabios son como aguijones, y como clavos hincados son las de los maestros de colecciones, dadas por un Pastor.
12 Y además de esto, hijo mío, sé amonestado: el hacer muchos libros es sin fin, y mucho estudio fatiga el cuerpo.
13 La conclusión, cuando todo se ha oído, es: teme a Dios y guarda sus mandamientos, porque esto es el todo del hombre.
14 Pues Dios traerá toda obra a juicio, junto con todo lo oculto, sea bueno o sea malo.
WLC
1 וּזְכֹר אֶת־בֹּורְאֶיךָ בִּימֵי בְּחוּרֹתֶיךָ עַד אֲשֶׁר לֹא־יָבֹאוּ יְמֵי הָרָעָה וְהִגִּיעוּ שָׁנִים אֲשֶׁר תֹּאמַר אֵין־לִי בָהֶם חֵפֶץ׃
2 עַד אֲשֶׁר לֹא־תֶחְשַׁךְ הַשֶּׁמֶשׁ וְהָאֹור וְהַיָּרֵחַ וְהַכֹּוכָבִים וְשָׁבוּ הֶעָבִים אַחַר הַגָּשֶׁם׃
3 בַּיֹּום שֶׁיָּזֻעוּ שֹׁמְרֵי הַבַּיִת וְהִתְעַוְּתוּ אַנְשֵׁי הֶחָיִל וּבָטְלוּ הַטֹּחֲנֹות כִּי מִעֵטוּ וְחָשְׁכוּ הָרֹאֹות בָּאֲרֻבֹּות׃
4 וְסֻגְּרוּ דְלָתַיִם בַּשּׁוּק בִּשְׁפַל קֹול הַטַּחֲנָה וְיָקוּם לְקֹול הַצִּפֹּור וְיִשַּׁחוּ כָּל־בְּנֹות הַשִּׁיר׃
5 גַּם מִגָּבֹהַּ יִרָאוּ וְחַתְחַתִּים בַּדֶּרֶךְ וְיָנֵאץ הַשָּׁקֵד וְיִסְתַּבֵּל הֶחָגָב וְתָפֵר הָאֲבִיֹּונָה כִּי־הֹלֵךְ הָאָדָם אֶל־בֵּית עֹולָמֹו וְסָבְבוּ בַשּׁוּק הַסֹּפְדִים׃
6 עַד אֲשֶׁר לֹא־יִרְחַק חֶבֶל הַכֶּסֶף וְתָרֻץ גֻּלַּת הַזָּהָב וְתִשָּׁבֶר כַּד עַל־הַמַּבּוּעַ וְנָרֹוץ הַגַּלְגַּל אֶל־הַבֹּור׃
7 וְיָשֹׁב הֶעָפָר עַל־הָאָרֶץ כְּשֶׁהָיָה וְהָרוּחַ תָּשׁוּב אֶל־הָאֱלֹהִים אֲשֶׁר נְתָנָהּ׃
8 הֲבֵל הֲבָלִים אָמַר הַקֹּוהֶלֶת הַכֹּל הָבֶל׃
9 וְיֹתֵר שֶׁהָיָה קֹהֶלֶת חָכָם עֹוד לִמַּד־דַּעַת אֶת־הָעָם וְאִזֵּן וְחִקֵּר תִּקֵּן מְשָׁלִים הַרְבֵּה׃
10 בִּקֵּשׁ קֹהֶלֶת לִמְצֹא דִּבְרֵי־חֵפֶץ וְכָתוּב יֹשֶׁר דִּבְרֵי אֱמֶת׃
11 דִּבְרֵי חֲכָמִים כַּדָּרְבֹנוֹת וּכְמַשְׂמְרֹות נְטוּעִים בַּעֲלֵי אֲסֻפֹּות נִתְּנוּ מֵרֹעֶה אֶחָד׃
12 וְיֹתֵר מֵהֵמָּה בְּנִי הִזָּהֵר עֲשֹׂות סְפָרִים הַרְבֵּה אֵין קֵץ וְלַהַג הַרְבֵּה יְגִעַת בָּשָׂר׃
13 סֹוף דָּבָר הַכֹּל נִשְׁמָע אֶת־הָאֱלֹהִים יְרָא וְאֶת־מִצְוֹתָיו שְׁמֹור כִּי־זֶה כָּל־הָאָדָם׃
14 כִּי אֶת־כָּל־מַעֲשֶׂה הָאֱלֹהִים יָבִא בְמִשְׁפָּט עַל כָּל־נֶעְלָם אִם־טֹוב וְאִם־רָע׃